Además de los lugares que ya os he enumerado en mi artículo sobre qué ver en Oviedo, no os olvidéis de hacer alto ante estas diez esculturas de gran belleza y que, aunque parezca increíble, encontraréis plantadas en plena calle.
1) La maternidad (1989)
Desde 1996 los ovetenses tienen el privilegio de toparse con esta preciosa obra del colombiano Fernando Botero cada vez que pasan por la Plaza de la Escandalera.
El orondo cuerpo de la madre, en pleno estilo Botero, ha valido a la escultura el apelativo popular de “la gorda”. ¡Y no hay para menos! La obra, realizada en bronce gris oscuro, pesa unos 800 kilogramos y alcanza casi los dos metros y medio de alto.